COMO AYUDAR AL QUE PERDIO UN SER QUERIDO…

LAS PALABRAS QUE NO AYUDAN

Recuerda:
El duelo no tiene color ni tiempo; es Único. Cada persona lo vive a su ritmo, a su manera.-

«Sé cómo te sientes»
(en verdad lo sabes?)

– «Sentí lo mismo cuando perdí a mi abuelita»
(pero nunca has perdido a tu madre)

– «Sentí lo mismo cuando perdí a mi sobrino»
(pero nunca has perdido un hijo)
Comparar sentimientos y situaciones sólo aumentan el dolor.

– «Dios sabe por que hace las cosas»
– «Dios no se equivoca»
– «No cuestiones a Dios»
(No me digas que Dios sabe lo que hace, ni hables de él, cuando he perdido la fe).
La pérdida de la fe es un sentimiento normal en el proceso de duelo, principalmente al inicio.

– «Dios manda pruebas a las personas fuertes»
– «Dios no te manda más de lo que puedas resistir»
– «Tienes que ser valiente»
(No me pidas valor, ni me digas que soy fuerte. No sé si podré seguir viviendo).
El miedo también es parte del proceso de duelo.

– «No hay mal que dure cien años»
– «Al mal tiempo, buena cara»
– «El tiempo lo cura todo»
– «En un año las cosas se superarán»
– «No sufras ni llores, todo pasará»
– «Es la ley de la vida»
(No me digas que pasará, no me pidas que sonría. Sempre me dolerá su ausencia)
Aún logrando culminar un duelo asertivamente, el dolor jamás desaparece.

«No llores, porque no lo dejas descansar»
– «Si te ve sufrir no irá hacia la luz»
(Déjame llorar él (o ella) ya está en la luz)
Para superar el duelo es vital permitir y ayudar a la persona que exprese sus sentimientos.
Cuando muere la pareja:
– «Puedes rehacer tu vida»
– «La vida sigue»
– «Pronto encontrarás otra persona en tu vida»
(No quiero a nadie más en mi vida, lo quiero a él -o ella-)
No existen sucedáneos para el ser amado.

Cuando muere un hijo
– «Quizás te iba a hacer sufrir y Dios te ama tanto que lo evita.»
– «Dios te ama tanto que ya tienes un angelito que te cuida»
(Por qué Dios no elige a uno de tus hijos para demostrarte su amor!)
Así es la ira que se siente en esos momentos.

– «Son jóvenes, tendrán otros hijos»
– «Dios suplirá con otros hijos»
– «Sólo era un bebé, apenas lo conocías, piensa en tus otros hijos.»
(Nada ni nadie suplirá a mi hijo. Sólo era un bebé? Qué edad elegirías para que muriera tu hijo?)
Pretender sustituir el amor con personas amadas presentes o por venir, puede incrementar el dolor y el coraje de la persona en duelo..

LO QUE SI AYUDA…

– Lo más importante: «Si no sabes qué decir, no digas nada. TU ABRAZO y TU PRESENCIA son suficientes»

– Procura respetar los sentimientos de tristeza, dolor, coraje, enojo, odio contra Dios, el mundo y su alrededor (estos sentimientos son pasajeros)

– Un oído paciente

– Respeta el SILENCIO en el velatorio

– Cuando un ser querido muere, hay poco que decir pero mucho por hacer (trámites, actas, pagos, etc.) Es en el hacer donde mejor puedes demostrar tu solidaridad. Encargándote de estos trámites administrativos es de suma ayuda.

– Ayuda también en hacerte cargo, en el primer tiempo, de quehaceres domésticos, por ejemplo, cuidar las plantas y mascotas de la casa. Acompañar a los más pequeños de la casa, hacerles alguna comida, etc.

Y para que te sientas mejor:
No te preocupes si ves triste o deprimida a una persona por largo periodo; pero si la ves alegre o más optimista, no es que deje de dolerle, simplemente está aprendiendo a vivir con ese dolor.

DURANTE EL VELORIO

Suele ser muy complicado para la familia que opta por traer al finado a la casa, sin contar con las instalaciones necesarias para ello (hay que proveerse de sillas, bebidas, algo de comer, etc.). También habrá que habilitar un espacio para los ramos, centros y coronas de flores. Y establecer algún tipo de horario, para evitar recibir a cualquier hora del día o de la noche.

En un velatorio lo que más sobran son las palabras, y lo más de agradecer es el gesto. Solamente por acudir, ya se demuestra el «interés» por la familia del fallecido. Tenga gestos de afecto y de cariño con la familia del fallecido, y no alargue en exceso su visita, ya que es un día muy «largo» para los familiares, y reciben muchas visitas.

Aunque la visita debería ser corta no abandone el velatorio si no hay ninguna otra visita con ellos (a menos que se lo pidan expresamente). Haga un poco de tiempo hasta que llegue alguien para dejarles acompañados. Hay que respetar la decisión de algunas familias de no recibir pésames, visitas ni condolencias.

A un velatorio no se llevan centros ni coronas de flores. Se envían, con un lema corto (de tus amigos, tus seres queridos, etc.). En cuanto al vestuario, es una elección personal. Si no guarda luto, al menos vista un color oscuro (los caballeros corbata negra).

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